Páginas
▼
BÚSQUEDA POR TEMA
Lo más leído de la semana
¿Es posible sacar a una persona del infierno con nuestras oraciones?
La condenación eterna no es un defecto de la misericordia divina, sino el respeto a la libertad.
Responder si una persona puede salir del infierno implica muchas cosas, sin embargo, algunas afirmaciones pueden centrarnos para entender la respuesta.
1. Hay que trabajar por ganarnos el cielo.
2. Sólo tenemos una vida en la que se gana el premio.
3. El premio de los actos buenos, de una vida en gracia de acuerdo a los mandamientos divinos, es la felicidad eterna con Dios: el cielo. El castigo a los actos malos, de los pecados mortales es la privación de la eterna felicidad con Dios y se llama infierno.
4. Con la muerte se acaba el tiempo de merecer (CEC 1021). La oportunidad para hacer actos buenos.
5. Inmediatamente después de la muerte se da el juicio de nuestros actos, juicio particular. El juez es Jesucristo.
6. Al juicio sigue la sentencia. Sólo son posibles dos: premio (cielo) o castigo (infierno) ambas son para siempre (CEC 1022). Pero la sentencia del cielo puede ser para gozar de él inmediatamente, o después de una purificación que llamamos purgatorio (CEC 1030).
7. El catecismo explica con claridad cuáles son las condiciones para recibir alguna de estas sentencias.
“Los que mueren en la gracia y en la amistad de Dios, pero imperfectamente purificados, aunque están seguros de su eterna salvación, sufren después de su muerte una purificación, a fin de obtener la santidad necesaria para entrar en la alegría del cielo” (CEC 1030).
“Los que mueren en la gracia y la amistad de Dios y están perfectamente purificados, viven para siempre con Cristo” en el cielo (CEC 1023).
“La enseñanza de la Iglesia afirma la existencia del infierno y su eternidad. Las almas de los que mueren en estado de pecado mortal descienden a los infiernos inmediatamente después de la muerte y allí sufren las penas del infierno, “el fuego eterno” (Cf. DS 76; 409; 411; 801; 858; 1002; 1351; 1575; SPF 12). La pena principal del infierno consiste en la separación eterna de Dios. (CEC 1035).
Por tanto, si la condenación en el infierno es inmediata y eterna, ya no hay nada que hacer por un condenado. La condenación eterna no es un defecto de la misericordia divina, sino el respeto más profundo de la libertad del hombre, quien libremente ha escogido pasar la eternidad sin Dios y como consecuencia con tormentos indecibles.
*El padre Rogelio Alcántara es director de la Comisión para la Doctrina de la Fe de la Arquidiócesis de México.
Publicaciones más leídas del mes
-
Los pecados mortales son faltas graves que, según la doctrina católica, rompen nuestra relación con Dios y nos privan de la gracia santific...
-
LOS 7 LIBROS QUE LOS PROTESTANTES QUITARON DE LA BIBLIA ¿CUÁL FUE LA VERDADERA RAZÓN QUE OCULTAN LOS PROTESTANTES PARA EXCLUIR LOS L...
-
ORACIÓN A LA CORAZA DE SAN PATRICIO CONTRA ASECHANZAS DEL MAL Y FUERZAS OSCURAS A esta oración se le conoce como Pectoral o Coraza...
-
SIGNIFICADO DE LOS OBJETOS DE LA BODA: ARRAS, ANILLOS, LAZO… Por Haydee Velázquez de Mondragón Toda la boda está llena de simboli...
-
TRES HERMOSAS ORACIONES PARA MORIBUNDOS Estas oraciones son muy útiles para el moribundo. Se deben repetir con frecuencia como un act...
-
ORACIÓN A LA SANGRE DE CRISTO PARA CASOS MUY DIFÍCILES Adorada Sangre de Cristo, A ti vengo con fe de mi alma a buscar tu Sagrado consuelo e...
-
La Iglesia católica tiene varios días de precepto en los que los fieles deben asistir a misa. Todos los domingos del año son días de precept...
-
¿DE VERDAD MURIÓ JESÚS EN UN “MADERO DE TORMENTO” Y NO EN UNA CRUZ? "Jesucristo no murió en una cruz. La palabra griega que s...
-
En los últimos días, han circulado rumores y especulaciones que afirman que Jesús Adrián Romero se volvió al católico . Sin embargo, es imp...
-
Señor, adoro tus Santas Llagas porque a través de ellas me has salvado y mostrado Misericordia. Cada herida en tu cuerpo es un testimonio vi...
Es verdad, después de la muerte ya no hay tiempo y viene la condena al purgatorio o al cielo o el premio, el cielo.
ResponderBorrar