Arek tiene 35 años, está separado y es ejecutivo en la industria de la aeronáutica. Durante muchos años atravesó un auténtico infierno por culpa de la pornografía. El portal Aleteia ha relatado el papel que jugó la Virgen María para que pudiera salir de esta complicada adicción.
«Cuando era niño escuchaba a mi madre decir que no tuvo tiempo para darme a luz. Es cierto que fue un momento difícil para ella. Trabajaba mucho. Cuando tenía dos años y medio, mis padres se divorciaron. Un año después, mi padrastro se mudó con nosotros. El ambiente era muy duro para mí porque mi madre era, y sigue siendo, una persona violenta», relata durante la entrevista.
Miedo al rechazo
Arek se guardaría ese sufrimiento para siempre. «Experimenté el rechazo y el ridículo. Así que estaba buscando algún tipo de salida. Una de ellas era la pornografía. Encerrado en mí mismo, solo hablé de eso en la confesión. Cuando era adolescente, estaba tan inmerso en ella que quise hablar con mis padres varias veces. Pero tenía miedo de que se rieran de mí y me faltaran el respeto», comenta Arek.
Luchaba, pero era muy complicado para él. «Traté de luchar contra mi adicción, pero estaba completamente abrumado. A veces lograba ‘resistir’ medio día. A veces un tiempo más largo, tres o cuatro meses. Hubo muchos intentos fallidos de liberarme de la pornografía. Con cada caída, era muy difícil volver a luchar», apunta.
Vivía una difícil situación personal y utilizaba la pornografía como una salida.
Y, entonces, la Virgen lo cambiaría todo. «María estuvo presente en mi vida desde el principio. Cuando era pequeño muchas veces escuché que me habían dedicado a Ella desde mi nacimiento: como estaba en peligro de morir, fui encomendado a la Virgen pidiéndole que sobreviviera. Poco después, mi condición comenzó a mejorar», explica.
Sin embargo, Arek se iba alejar durante un tiempo de María. «Durante años no presté mucha atención a la Madre de Cristo. En mi último cumpleaños me di cuenta de que mi fecha de nacimiento correspondía a una fiesta mariana. Pero, la intercesión de María después de mi nacimiento no iba a ser la única vez que sintiera su presencia», confiesa.
El abrazo de la Virgen
Arek asegura que su curación está ligada a María. «Tuvo lugar durante una peregrinación al santuario mariano de Czestochowa en Polonia. En ese momento tenía adicción a la pornografía y a la masturbación. Sin embargo, cada peregrinación me permitía vivir diez días en pureza y libertad interior. Era un tiempo maravilloso. De forma natural asocié este estado a María. Al ponerme bajo su manto durante la caminata, experimentaba algo hermoso», explica.
En el verano de 2012, Arek sufrió un accidente y no pudo acudir a la peregrinación. «Decidí visitar a mis amigos que iban a Czestochowa. Durante la oración común escuché una voz interior que decía: ‘De ahora en adelante no te masturbarás más y no mirarás más pornografía’. La voz de la Virgen era la voz femenina más hermosa que jamás había escuchado. Fue una experiencia increíble, llena de ternura y protección maternal. Lo que sentí era casi palpable, era tan concreto… Nunca antes había tenido una experiencia así. Era inimaginable para mí», explica.
Su relación con la pornografía se terminó. «Desde entonces, puedo abrir una computadora sin querer visitar un sitio pornográfico. No siento esa necesidad. Incluso diría que es más bien lo contrario. Cuando veo contenido como este, lo evito. Soy consciente de que es una gracia que no puedo permitirme desperdiciar. Mi curación continúa a día de hoy. Me recuerda a María cuando tengo la tentación de olvidarla y me da un sentimiento de gratitud y de amor hacia Ella. María intercedió por mí. Ella tiene un lugar en mi corazón», señala Arek.
Sin embargo, apunta que la curación no tuvo lugar de la noche a la mañana. «Las consecuencias mentales o físicas de la adicción permanecieron. Las tentaciones siempre están ahí. Pero, ya no existe en mí este riesgo continuo de ceder. Apareció la conciencia y el autocontrol, pero se mantuvo la inclinación a mirar a una mujer con lujuria, por ejemplo», relata.
Arek se sanó de sus adicciones gracias a la Virgen de Czestochowa.
Arek se siente agradecido y procura ayudar a los que ahora son adictos. «Sin esta gracia, creo que experimentaría serios dramas en mi vida. No sé por qué Dios hizo esto. Quizá lo descubra después de que muera. Por otro lado, el gran beneficio de mi curación es también la comprensión y el apoyo en oración que puedo brindar a otros adictos. Cuando escucho a alguien decirme que está luchando con un problema como este, automáticamente se dispara en mí el deseo de orar por ellos y apoyarlos», comenta.
Para él, sin la Virgen María no habría podido salir. «No tuve una madre dulce y amorosa. Necesita a la Virgen. La mejor confirmación de lo que estoy diciendo son las lágrimas en mis ojos y mi voz empezando a quebrarse mientras te lo cuento… Esa es la única explicación que se me ocurre. Por eso encomiendo a María a todos aquellos que viven con tal dependencia. Ella es la figura central de mi experiencia de castidad, dulzura y ternura maternal», concluye.
Es Nuestra Madre nunca abandona a sus hijos...
ResponderBorrarGracias por tan bello testimonio!
ResponderBorrarQue bello testimonio gracias por compartirlo Dios y Nuestra Madre Santísima lo siga guiando en los buenos caminos de la vida se que a muchos jóvenes les ayudará este testimonio
ResponderBorrarOre por mi porfavor lo necesito también
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