¿En el cielo Jesús tiene las heridas de la crucifixión?



La cuestión de si Jesús conserva las heridas de la cruz en el cielo es un tema que ha sido objeto de reflexión y debate en la teología cristiana. En la tradición católica, la respuesta a esta pregunta es afirmativa: creemos que Jesús conserva las heridas de la cruz en su cuerpo glorificado.

Esta creencia se basa en varios pasajes bíblicos que describen la aparición de Jesús resucitado a sus discípulos después de su muerte y resurrección. En el Evangelio de Juan, por ejemplo, leemos que cuando Jesús se apareció a los discípulos en el cenáculo, les mostró sus manos y su costado heridos: "Entonces se alegraron los discípulos al ver al Señor. Jesús les dijo otra vez: 'La paz esté con ustedes. Como el Padre me envió, también yo los envío'. Y, dicho esto, sopló sobre ellos y les dijo: 'Reciban el Espíritu Santo. A quienes perdonen los pecados, les quedarán perdonados; a quienes no se los perdonen, les quedarán sin perdonar'" (Jn 20,20-23).

Este pasaje sugiere que las heridas de Jesús son una parte importante de su identidad como el crucificado y resucitado, y que son una prueba de su amor y su sacrificio por la humanidad. Al mostrar sus heridas a los discípulos, Jesús les estaba diciendo que él había pasado por el dolor y el sufrimiento que ellos estaban experimentando, y que estaba dispuesto a compartir sus heridas con ellos como signo de su amor y su solidaridad.

En la tradición católica, por lo tanto, creemos que Jesús conserva las heridas de la cruz en su cuerpo glorificado como una muestra de su amor por nosotros y como un signo de su identidad como el crucificado y resucitado. Estas heridas no son una fuente de dolor o sufrimiento para él, sino más bien un signo de su triunfo sobre el pecado y la muerte, y un recordatorio de su amor por nosotros.

En resumen, la creencia católica de que Jesús conserva las heridas de la cruz en su cuerpo glorificado es una expresión de nuestra fe en su amor y su sacrificio por la humanidad. Esta creencia nos invita a reflexionar sobre el significado de la cruz en nuestra propia vida, y sobre el amor y la misericordia de Dios que se revelan en la pasión y la resurrección de Cristo. Que esta respuesta haya sido de ayuda para aclarar su pregunta. Si tiene alguna otra inquietud, no dude en hacérmela saber. Estoy aquí para ayudarlo en lo que necesite. Que la paz de Cristo esté siempre con usted.

Autor: Pbro. Ignacio Andrade.

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